Y descubrir en un instante lento
que tu estabas tan hambriento
como yo hasta el momento
de un nosotros como el nuestro
Y conviertes mi piel en otra de gallina
mientras me supuran las risas
y me dejo caer
honestamente vencida.
Y me derrito como de cera
en tus manos de hoguera.
-
Sólo estamos tú y yo
escondiéndonos por los rincones
preguntándonos en silencio
qué pasará mañana.
Y descubrir que pase lo que pase
estamos hechos para deshacernos.
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