Son palabras ya vacías las que escribo,
porque simple y sola yo, soy quien me llena,
olvido el paso del maldito cuando duela,
y quiero, amo, respeto y valoro mis consecuencias.
Soy únicamente un pincel manchado de tinta
que deja marca en los papeles que va rozando,
algunos puestos a mi lado por el viento,
otros correctamente meditada su procedencia.
Mastico pieles en las que me diluyo,
intentando ganar tiempo de respirar,
me relamo los bigotes y sonrío,
cansada y satisfecha por las cazas realizadas.
Oh, pequeños, indefensos, ilusos y asustadizos ratones
que caéis entre mis uñas,
y entre zarpazos quedáis sometidos,
sois víctimas.
De la lujuria, la pasión, el engaño y su posterior desesperanza.
Porque soy calidamente gélida...
y no podréis nunca llegar a poseerme del todo,
soy etérea y breve,
clavo el suficiente veneno en el corazón...
Para que siempre tengas ganas de volver a mí.
Y post intoxicación cerebropulmonar
me extasio...
Todo es demasiado fácil.
Cuando nada te cuesta trabajo, nada valoras
lo tengo con certeza comprobado.
lo tengo con certeza comprobado.
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