Mi sexo se humedece, se estremece y me sumerjo en un sinfin de placeres, haz tus deberes,
¿Me quieres?
Provocame, dame el placer que desees,
¿Lo estás sintiendo? Estoy ardiendo,
¿A qué esperas?
Me elevas mordiendo mi argumento, lamiendo lo que tengo dentro y yo lo siento tan profundo que me hundo entre las sabanas comiendome el mundo,
acariciandome me asusto, ¡OH dios, Qué gusto!
Creas en mí tal sinfin de sensaciones,
reacciones a acciones que hacen que vuelen mis pudores.
Lo veo justo, y necesario...
¿El escenario?
Cualquier lugar del barrio,
legionario del placer complementario,
de un amor contemporáneo, en cualquier estación del año,
en el baño, o en el ático.
Olores correspondientes a sabores corresponsales del mayor amor del extrarradio,tan dulce y salado, tan extraño.
Y lo amo...
Te amo (:
Sandy R.A
Tus textos si que humedecen. Marcan. Espectacular.
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